18:35:23 Viernes, 26 Abril

La vecina isla de La Graciosa tiene la suerte de poseer algunas playas largas y vírgenes con dunas de fina arena blanca. De hecho, muchos consideran que se encuentran entre las mejores de todo el archipiélago canario.

Muchas de las mismas están bastante apartadas y todos los que desembarcan en sus costas son premiados con su impactante belleza, sus impresionantes vistas, su suave arena, sus límpidas aguas y una tranquilidad digna de reyes. Se puede acceder solo a unas pocas a pie, lo que puede llevarles un tiempo porque las carreteras son de tierra. Hay disponibilidad de taxis: infórmese en la recepción de su hotel y ellos le ayudarán a organizar su viaje.

La más bella es, sin duda, la Playa de las Conchas (500 m), situada al noroeste, que posee unas espectaculares vistas de los islotes de Montaña Clara, Roque del Este y Alegranza. Las aguas pueden ser bravas en esta costa, así que ha de extremar las precauciones.

Muy cerca encontrará las playas de Caleta de Arriba, La Laja y El Salado, una franja de fina arena dorada con tranquilas aguas y que mide alrededor de 1.5 km. Ha de llegar caminando a esta parte, pero el paseo merece mucho la pena.

Además, hay algunas más muy cerca, como Playa Francesa o Playa La Cocina al sur, o Playa Lambra en la costa norte... ¡y sigue la cuenta!

Como ocurre en la mayoría de las playas de Lanzarote, asegúrese de que no haya mucha resaca y de que el baño es seguro.

La Graciosa tiene todo para los que busquen paz, belleza natural y olvidarse del mundo. Merece mucho la pena visitarla en un viaje de un día, independientemente de dónde se hospede. Para recibir más información sobre los hoteles de 4 y 5 estrellas situados en los mejores complejos y con la mejor relación calidad-precio de Lanzarote, haga clic aquí.